Editorial de la Semana

No te llames cristiano…

Las personas tienden a ser menos restrictivas y más abiertas cuando se expresan en las redes sociales. La ausencia de reacciones inmediatas y visibles, como las expresiones faciales, reducen la cohibición que los usuarios pueden experimentar al expresarse. A este fenómeno se le ha llamado «desinhibición en línea». En sus redes sociales las personas transparentan más honestamente su personalidad y manifiestan sus emociones y valores.

En las redes uno puede encontrar todo tipo de contenidos y de personas. Algunos se muestran en sus perfiles como cristianos, ya sea de manera asertiva o tácita. De ellos, unos dejan traslucir que son cristianos tanto por sus postulados, que muestran una lealtad al evangelio, como por su tono, en el que se percibe el respeto, la moderación y la humildad. Pero otros no poseen ni un mensaje ni un talente que tenga que ver con las buenas nuevas de Jesús.

Estos perfiles presentan una visión de un mundo dividido entre personas buenas sin pecado y malos sin redención posible. Utilizan la mentira y el insulto contra quienes no comparten su manera de ver las cosas. Ni las más honorables personalidades de iglesia se salvan de sus ataques furibundos. Es verdad que la crítica a los liderazgos eclesiales no necesariamente es mala, hay ocasiones cuando puede resultar buena y necesaria. Pero la mentira y el insulto no son recursos evangélicos y, por lo mismo, quienes los usan tampoco pueden ser cristianos aunque así quieran presentarse.

También existe todo tipo de personas entre los usuarios de las redes. Están las personas que logran percibir la incoherencia entre la confesión religiosa que alguien profesa y su manera de expresarse. Pero otros, lastimosamente, tienden a fiarse del lenguaje religioso olvidando que no todo lo que brilla es oro. Estos últimos, con frecuencia se vuelven replicadores de aquellos sin corroborar la veracidad de los contenidos y sin verificar las implicaciones éticas de las ofensas. Así, viralizan con toda liviandad mentiras y ataques que desdicen de su carácter moral.

Hay perfiles que se dicen ser cristianos que les dan gran relevancia a las prácticas religiosas, pero pasan muy de lejos por el capítulo veinticinco de Mateo, donde Jesús dice con toda claridad que él se encuentra en los hambrientos, sedientos, migrantes, desnudos, enfermos y encarcelados. En el desprecio que hacen de esos desposeídos muestran lo lejos que se encuentran de comprender el corazón de Dios. Son muy asiduos en temas como la participación en cultos y el uso parcializado de pasajes de la Biblia, haciéndose pasar por maestros de cosas que en verdad no comprenden, para luego lanzarse con toda saña a atacar a personas de quienes no conocen nada.

Jesús aseguró: «El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca». Lo que se expresa en las redes sociales es el más fehaciente testimonio de lo que se oculta en el corazón de sus administradores. No es necesario juzgar ni investigar nada, sus palabras revelan su interioridad. La vida no puede ser compartimentada entre lo religioso y lo seglar. Eso constituiría un desdoblamiento de la personalidad que no admitiría ningún otro calificativo que el de hipócrita. Las Escrituras que tanto manipulan como instrumento de desprecio y ofensa, serán las que les juzgarán al final. Les condenarán las mismas Escrituras en las que dicen confiar.

Jesús invitó a sus seguidores a no juzgar a los demás. Pero estos pretendidos creyentes no solo se erigen como jueces, sino que juzgan y condenan a todo aquel que ejerce su derecho a pensar de manera propia. No solo usan el nombre de Dios en vano, sino también el de cristianos. Si una persona no es capaz respetar a su prójimo, si lo que desea es forzarlo a pensar como él, si no puede dejar de juzgar a quienes no conoce, si toma sus pasiones e ignorancia como referentes de la justicia, si deja que sus odios le nublen la visión, es mejor que deje de llamarse cristiano en lugar de que vaya a recibir un mal mayor cuando su vida llegue a su fin.

Restauración 100.5 FM · Editorial de la semana – No te llames cristiano
Comments
4 Responses to “No te llames cristiano…”
  1. Eunice Acosta dice:

    Muchas gracias hermano por esa reflexión. Que Dios nos de la sabiduría necesaria para no caer en esos pecados que nos llevan a destruir a otros y a nosotros. Dios sea con usted cada día.

  2. Eunice Acosta dice:

    Muchas gracias hermano por esa reflexión. Que Dios nos de la sabiduría necesaria cada día.

  3. Eunice Acosta dice:

    Muchas gracias hermano por esa reflexión. Que Dios le bendiga y proteja..

  4. Adal R dice:

    La comunicación real está en Dios escondida en Cristo.

    Hay distintos factores y elementos que atrapan al hombre cuando utiliza las redes sociales. La enorme cantidad de información, los perfiles, los gustos y deseos, las tendencias, las opiniones, la noticia del momento, el entretenimiento, los juegos, las relaciones sociales y personales, etc. Desde el inicio de estos medios de comunicación el hombre ha sido expuesto a una conducta esclavizante, al asombro, a la novedad incierta, a mentiras y estafas, a ilusiones ópticas, a chistes y rumores, y un sin número de cosas que antes solo era parte de la radio, tv y periódicos o revistas. Dentro de toda esta maraña de elementos que absorben la voluntades, el tiempo, los recursos fisicos y psíquicos del usuario, se presentan de lo novedoso, como en el pasado, un atractivo para las masas. Hay propaganda y publicaciones de origen inmoral, insensato y el desatino conductual. Es algo alienante que atrapa a millones de personas en lo algo sutil e incierto haciendolo mas vulnerable y frágil mas de lo que es. Es una arma de doble filo muy brillante. Digo brillante porque toma un lugar en el corazón humano hasta reinar. Es un ídolo. De gran apertura, Ya que cualquier tipo de persona genera su contenido y ya, lo sube al ciberespacio, en todas direcciones sin importar parámetros y patrones justos y dignos. Esa manera de generar contenido abre el nuevo telón para presentar ante el mundo el ídolo virtual, la atracción visual, despierta la curiosidad, abre espacio a lo engañoso, a lo deshonesto, a la apariencia, a burlas y ofensas. El corazón se abre como un abismo para sacar lo malo, lo nocivo, lo vulgar, el irrespeto, lo engañoso o novedoso, los malos pensamientos de corazones no redimidos o deseosos de cosas destructivas. Se acrecienta el problema muy grande para el hombre: lo vulnerable. Las dos caras: Se publican cosas para producir risa, asombro, enojo, burla, ofensa sutil, engaño, fantasía, vanidad de vanidades. Como también puede encontrarse cosa útiles para la vida y desarrollo del hombre. Con las redes sociales, el ídolo del Siglo XXI viene dañando el corazón que siempre trata de buscar, desear y granjear. Y si los deseos e intenciones son dominadas por las mentiras en las redes sociales, el caos ha llegado a toda la sociedad. No respeta credo, raza, sexo, edad ni personalidad, es la trampa y el fango juntamente. Debe haber un firme deseo hacia Dios de no caer en ese río de impiedad y lejanía hacia Dios. El ídolo de las redes sociales como el río de arenas movedizas donde no hay firmeza que valga. Se requiere de posar nuestros pies en roca firme y enfrentar todo tipo de viento tempestuoso. Si no persecución hoy pero si hay destrucción en el fango de las redes sociales.
    ¿Cual es la razón de esta forma de comunicación esclavizante o adictiva? La Manipulación de las conductas, el uso de para persuadir la mentes de manera sigilosa y oculta. Considero que las redes sociales de uso actual como la modalidad de las comunicaciones, presentan ventajas y desventajas, entre las ventajas encontramos:
    – Permiten conocer información, opiniones, tormenta de ideas y alternativas.
    – Permite una variedad de oportunidades en distintos campos, ya sea comercial, educativo, laboral, relacional.
    – Permite conocer otras personas de distintas latitudes y culturas.
    – Abre espacio al intercambio artístico y formas de entretenimientos. Como la fotografía, videos, música, películas y más.
    Y cada ventaja hacen ver las cosas como positiva, confiables y no ofensivas, pero dentro de todas estas ventajas, existen desventajas que se vuelven con el uso nocivas y esclavizantes. Veamos:
    – Son altamente adictivas, esclavizantes entre jóvenes, niños, adultos y ancianos, por su contenido altamente persuasivo y peligroso. Ya que incluye: el uso de la percepción, las emociones, la imaginación y la saturación de mensaje subliminal, que tiende a manipular conductas.
    – Son plataformas que impactan las conductas, emociones, pensamientos y deseos.
    – Son vulnerables las redes sociales ya que se da la suplantación de identidad, la copia de tarjetas de crédito, la venta de productos defectuosos, estafas, robos de datos y fraudes.
    – Se expone a opiniones engañosas y actitudes dañinas. Perfiles y conductas ofensivas, como los llamados trolles (se dedican a criticar e insultar en redes sociales y otras plataformas). Y esto contamina.
    Quizá lo delicado de las redes sociales es que impactan en las decisiones, pensamientos y la voluntad. Toda decisión que hagamos es un acto de voluntad. Y ahora en las redes sociales se tiende a influenciar las voluntades. Así que ya de por sí en un problema para millones de personas. Recuerdo que un padre de familia se sentó a comer con su familia y cada una de sus tres hijas también se sentaron a tomar los alimentos. Pero lo difícil y triste para este hombre (según me comentó), fue verlas con su dispositivo móvil mas interesadas en esa comunicación irreal y vana. No hubo comunicación con El, no hubo conversación familiar. Cada una con su plato de alimentos se enfriaba, mientras seguían sentadas a la mesa. Y el tiempo paso sin palabras. Así muchos creyentes que han conocido la verdad, y teniéndolo todo no lo aprovechan. Con el plato de comida que Dios lo da, y sin dar gracias ni orar. Se pierden mucho en las redes sociales y eso no se percibe, por lo emocionante que son. ¿Qué cosas se pierden cuando existe adicción y esclavitud en la distintas plataformas?
    Se pierde: el tiempo, el dinero, la dignidad, el sano juicio, la verdadera personalidad, no hay oración ni voz ante Dios (las malas comunicaciones corrompen las buenas costumbres), se pierde los buenos deseos encaminados al bien, se daña la firmeza espiritual, y la conducta es atrapada por cualquier mentira en las redes sociales.
    Se debe hacer un stop, y pedir a Dios fortaleza para conocer el tipo de engaño, mentira que corre en las plataformas. Se debe prestar más atención a la atracción que presentan. Los atenienses se divertían oyendo algo nuevo, Hechos 17:21 (Porque todos los atenienses y los extranjeros residentes allí, en ninguna otra cosa se interesaban sino en decir o en oír algo nuevo.) ¿Cuantos estan seducidos por oir algo nuevo, por ver la última noticia? Pero la base de todo y prioridad debe ser Jesucristo. Debemos buscar el Reino de los cielos primeramente.
    Muchos cristianos se ven atrapados por las redes sociales, pero aun hay esperanza para salir de la esclavidad momentánea. Cristo debe vivir en nosotros, y el uso de las plataformas debe estar enfocadas al Reino de los cielos, en la educación cristiana o paraeclesiales, en la música cristiana, en el texto bíblico, en la sana doctrina, en los fundamentos teológicos. En promover las misiones y enviar obreros a otras regiones.
    Si hay algún mal uso de las redes, vengamos ante Dios, acerquemonos a Él, rendimiendo el tiempo. Buscando más de su presencia. Las redes son desgastantes pero el buscar el refrigerio del Espíritu de Dios es la victoria para enfrentar este siglo malo. Cristo nos dio la mejor forma de comunicación inalambrica, sin ofensas ni pecados, por su sangre preciosa y la Unción del Santo. El Señor nos perdona y nos da vida abundante. Para ser grande es importante humillarnos delante de Cristo. La publicidad dentro de los medios de comunicación falla y pierde brillo. Pero en Cristo venimos a ser luminares ante el mundo para Gloria de Dios. Amén
    Amén

    Adal R
    11nov2024

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