Desde hace dos años, en la iglesia Elim de El Salvador nos hemos enfocado en recuperar la asistencia que teníamos antes de la pandemia. Dios ha sido bueno y nos ha permitido tener una mejora: hemos logrado recuperar un estimado de 7,000 asistentes a las células, lo cual, se ha reflejado en nuestros cultos de celebración también.
Al debatir sobre cualquier tema las personas pueden ser honestas o desvergonzadas. Las honestas son aquellas que exponen sus ideas y tratan de refutar las contrarias por medio de argumentos veraces y razonamientos lógicos.
La semana anterior escribí sobre el reconocimiento que entregamos a nuestros campeones celulares que alcanzaron la meta de dos conversiones en el año. Una de nuestras campeonas fue Consuelo, quien no solo logró dos conversiones, sino que cuatro.