Lección de células de adultos para sábado 3 de julio
Sábado 3 de julio de 2021
La oveja perdida
LECTURA: Lucas 15:3-7
3 Entonces él les refirió esta parábola, diciendo: 4 ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla? 5 Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso; 6 y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido. 7 Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento.
VERDAD CENTRAL: Jesús vino para buscar las ovejas perdidas y llevarlas a su rebaño.
INTRODUCCIÓN
Jesús usaba parábolas con bastante frecuencia para enseñar. Eso ha permitido que el concepto de parábola sea muy conocido por las personas. Pero, definir exactamente qué es una parábola no es tan fácil como podría parecer. Por ahora, baste con decir que es una comparación extraída de la naturaleza o de la vida cotidiana con el objeto de iluminar alguna verdad espiritual, de manera que lo válido en una esfera lo sea también en la otra. Pero algunas veces no es tan fácil establecer esa relación entre lo conocido de la vida diaria con lo extraordinario del reino de Dios. En esa tarea ayuda mucho seguir el curso pedagógico de la parábola hasta su fin lógico para poder descubrir la verdad que el Señor deseaba transmitir. Eso es lo que intentaremos hacer.
CUERPO
1- La oveja perdida. La parábola que hoy consideramos es clasificada como interrogativa. Se las llama así porque comienzan con una interrogación. En este caso, la mitad de la parábola es una pregunta: «¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?» (v. 4). La oveja que se le perdió al pastor representa al ser humano que se alejó de Dios. A causa del pecado y la terquedad el hombre se alejó del rebaño de Dios haciendo su propia voluntad. Al seguir sus propias opiniones pronto se dio cuenta que se había alejado tanto que ya no pudo encontrar el camino de regreso. Por su parte el pastor, que representa a Dios, se dio cuenta que le hacía falta una oveja. Él las tenía contadas porque a cada una la consideraba valiosa. Fue a buscar a la oveja perdida hasta que finalmente la encontró. El amor de Dios no descansa en busca del pecador. Por lejos que una persona ande de los caminos del Señor, siempre su amor abundará para ir a buscarla.
2- Celebrar el amor de Dios. Cuando el pastor encontró a su oveja la colocó sobre sus hombros. Ese es un gesto de cuidado al mismo tiempo que de cariño. El pastor actúa motivado por el amor que siente hacia sus ovejas. Luego, volvió a su rebaño: «Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso; y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido» (v. 5-6). Para el pastor era importante hacer fiesta porque había encontrado a su oveja. Se pude presumir que sus vecinos eran también pastores, por tanto, comprenderían la razón de su alegría. De manera que los invitó a celebrar con él. El que Dios reciba a los pecadores extraviados para otorgarles su perdón debe ser siempre motivo de alegría. Lastimosamente, algunos no se gozan porque los malos y perversos se arrepientan. Desean a Jesús solo para un grupo pequeño de personas que se han santificado y que lo «merecen». Pero el Señor abre la puerta del perdón para todo descarriado que quiera acercarse. Los malos siempre deben ser bien recibidos por el pueblo del Señor.
3- La moraleja de la parábola. Al final de su relato Jesús expresó la enseñanza principal: «Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento» (v. 7). Jesús había contado la parábola con relación a la actitud de los fariseos que se consideraban santos y que se molestaban porque personas de mal vivir decidían seguirlo. Para Dios es más importante el arrepentimiento de una persona mala que la supuesta santidad de las personas religiosas. Por esa razón, las puertas de las iglesias siempre deben estar abiertas para recibir amorosamente a quienes practican pecados escandalosos. En eso consiste el amor de Jesús y el propósito del evangelio. Que siempre sean bienvenidos en las iglesias los miembros de pandillas, los adictos y los transgénero.
APLICACIÓN
Todo ser humano es una oveja que se extravió. Todos hemos pecado de una forma u otra y nos hemos alejado del redil. Pero Dios notó nuestra ausencia y envió a su Hijo quien es el Buen Pastor, que decide dejar aquellos «justos» en su torre de marfil para acercarse amorosamente a los perdidos, para redimirlos. Es necesario que cada persona reconozca que se alejó del rebaño y que se encuentra lejos del buen camino. Dios se agrada con los humildes de corazón, no en los orgullosos que se autojustifican. Hoy es el mejor momento para dejarse acoger por el pastor de las ovejas. Eso se logra por un arrepentimiento sincero y por recibir al Señor Jesús como salvador.
El amor al prójimo es todo después del amor a Dios, humildemente les digo la luz llegAra a cada rincón
¿Cuál es la temática o nombre de la guía del trimestre julio – septiembre?