Lección de guía de células de adultos para sábado 16 de abril
La conversión reflejada en el dinero
LECTURA: Lucas 19:1-10
1 Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad. 2 Y sucedió que un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico, 3 procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura. 4 Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle; porque había de pasar por allí. 5 Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa. 6 Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso. 7 Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador. 8 Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. 9 Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. 10 Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.
VERDAD CENTRAL: La conversión también cambia la actitud hacia el dinero.
INTRODUCCIÓN
Se dice que el dinero corrompe porque hay personas ricas que manifiestan su corrupción a través de la mala utilización de sus riquezas. Pero, no hay que perder de vista que también hay personas ricas justas que demuestran su justicia por la forma piadosa en que invierten su riqueza. Igualmente, entre los pobres también hay quienes son corruptos y quienes son justos. Así que no necesariamente el dinero corrompe. Pero su uso sí revela la corrupción interna de las personas. El dinero no es el problema esencial. Solo es un indicador del problema real: el pecado que está en el corazón.
CUERPO
1- Un hombre extorsionador. Jesús entró a la ciudad de Jericó, donde vivía «un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico» (v. 2). Los publicanos eran judíos que se prestaban para cobrar los impuestos para los invasores romanos, por lo que eran vistos como vende patrias. Solían cobrar más de lo que los romanos esperaban y con esos excedentes se volvían ricos rápidamente. Zaqueo era el jefe de un grupo de publicanos, lo cual, nos da una idea de lo rico que se había hecho en base al robo y la extorsión. Se había centrado totalmente en acumular tanta riqueza como le fuera posible, aunque implicara defraudar a los pobres. Su enfoque en la vida era acumular tanto dinero como pudiera, sin importar cuántas personas resultaran dañadas por eso.
2- La elección de Jesús. A pesar de su egoísmo, Zaqueo deseaba conocer a Jesús. Tuvo que subirse a un árbol para poder verlo ya que era bajo de estatura. «Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa. Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso» (v. 5-6). Conforme a su costumbre de buscar a los peores, Jesús escogió ir a la casa de Zaqueo para comer. Zaqueo fue sorprendido por la elección de Jesús, pero al mismo tiempo se sintió honrado. La visita de Jesús fue silenciosa, pero su sola presencia hizo reflexionar a Zaqueo sobre su conducta y su egoísmo. Se dio cuenta de que su proceder había sido muy malo. Experimentó un arrepentimiento y decidió tener un cambio de vida.
3- La conversión de Zaqueo. La transformación de Zaqueo fue tan genuina y dramática que «puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado» (v. 8). La conversión de Zaqueo afectó de inmediato su manera de ver y manejar el dinero. La evidencia inicial de su vida transformada fue su actitud completamente cambiada hacia el dinero. De manera pública se comprometió a repartir la mitad de sus bienes entre los pobres y a devolver cuadruplicado lo que había defraudado. Su actitud ante el dinero y las necesidades del prójimo habían cambiado radicalmente. Ahora la gloria de Dios y el bien de los demás estaban por arriba de las riquezas. Su conversión no se evidenció por realizar alguna ceremonia o por orar de alguna manera, ocurrió al pasar del egoísmo a la generosidad. Toda persona que experimenta una verdadera conversión debe tener también un cambio en la manera cómo maneja el dinero. Al llegar a Jesús es importante rendir a él todo lo que se es y lo que se tiene. No se debe reservar ningún aspecto de la vida para manejarlo al propio antojo. Todo debe ser hecho de acuerdo con sus enseñanzas.
APLICACIÓN
Cuando Jesús escuchó las palabras de Zaqueo, replicó: «Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido» (v. 9-10). Jesús declaró lo que acababa de ocurrir: la salvación había llegado a esa casa. Nadie puede confiarse en ser salvo si sus actitudes frente al dinero siguen siendo las mismas. La verdadera conversión se refleja en la manera cómo se maneja el dinero. Es un asunto que no se debe separar, la espiritualidad debe abarcar a la persona completa. Hoy es el momento para rendirse a Jesús.
Bendiciones solo queria preguntarles si todabia seguiran a traves de esta pagina redactando guias para adultos en las celulas familiares me gustaria saber ya que me estan ayudando mucho para poder compartir con otras personas. Gracias Dios les bendiga